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Consejos Sobre el Régimen Alimenticio
Evítense las combinaciones complejas
415. En todos los restaurantes de nuestras ciudades, hay peligro
de que la combinación de muchos alimentos en los platos servidos
sea llevada demasiado lejos. El estómago sufre cuando se introducen
en él tantas clases de alimentos en una misma comida. La sencillez
es una parte de la reforma pro salud. Hay peligro de que nuestra
obra deje de merecer el nombre que ha tenido.
Si queremos trabajar por la restauración de la salud, es necesario
restringir el apetito, comer lentamente, y sólo una variedad limitada
a un tiempo. Esta instrucción necesita ser repetida con frecuencia.
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No está en armonía con los principios de la reforma pro salud tener
tantos platos diferentes en una misma comida. Nunca debemos
olvidar que es la parte religiosa de la obra, la obra de proporcionar
alimentos para el alma, lo más esencial.—
Carta 271, 1905
.
La misión de los restaurantes higiénicos
416. Se me presentó el hecho de que no debemos darnos por
satisfechos porque tenemos un restaurante vegetariano en Brooklyn,
sino que otros deben establecerse en otras secciones de la ciudad.
La gente que vive en una parte del Gran Nueva York no sabe lo que
ocurre en otras partes de la gran ciudad. Los hombres y las mujeres
que comen en los restaurantes establecidos en los diferentes lugares
llegarán a estar conscientes de una mejora en la salud. Una vez
ganada su confianza, estarán más dispuestos a aceptar el mensaje
especial de verdad que Dios tiene.
Dondequiera se realice obra misionera médica en nuestras gran-
des ciudades, deben realizarse escuelas de arte culinario; y donde-
quiera esté en proceso una obra educacional y misionera vigorosa,
debe establecerse un restaurante higiénico de alguna clase, que dé
una ilustración práctica de la correcta selección y de la debida prepa-
ración de los alimentos.—
Testimonies for the Church 7:55 (1902)
.
417. El Señor tiene un mensaje para nuestras ciudades, y este
mensaje hemos de proclamarlo en nuestros congresos y en cam-
pañas de evangelismo público, y también por medio de nuestras
publicaciones. En adición a esto, han de establecerse restaurantes
higiénicos en las ciudades, y por su medio el mensaje de temperancia