Página 601 - Consejos Sobre la Salud (1989)

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Médicos y evangelistas
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los mensajeros terrenales. Estos instrumentos llevarán a cabo más
que la página impresa, si es que trabajan con el Espíritu y el poder
de Cristo. Cristo trabajará por medio de sus ministros elegidos, los
llenará con el Espíritu Santo y en esta forma cumplirá en ellos esta
promesa: “He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin
del mundo”.
Mateo 28:20
.
Al presentar la verdad a los incrédulos, conviene presentarles
primero algunos temas con los cuales puedan concordar con noso-
tros. Los principios de salud y temperancia les resultarán de interés,
y de allí podremos conducirlos a comprender la importancia del
cuarto mandamiento. Los médicos pueden contribuir a llevar a cabo
esta obra. Cuando la gente ve el valor de la instrucción impartida
con respecto al sano vivir, confía en que los que enseñan nuestros
principios también tienen la verdad en otros aspectos.
Es el plan del Señor que los médicos bien versados en la verdad
bíblica se unan con los pastores para trabajar en las ciudades y les
ayuden a presentar un mensaje completo y armonioso de advertencia
para amonestar al mundo. Algunos de los hombres calificados de
nuestras instituciones debieran elegirse para llevar a cabo esta obra.
Algunos pueden pensar que no es prudente tomar a hombres
calificados para la posición de médicos jefes y colocarlos a trabajar
en las ciudades, aunque hombres escogidos ocupen sus lugares en
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las instituciones. Pero necesitamos tener un concepto más amplio de
la obra y considerar que el Señor está llamando a que se lleve a cabo
una línea especial de trabajo en las ciudades, una obra que requiere
los esfuerzos de hombres de clara percepción, quienes, con el poder
del Espíritu Santo, puedan presentar los principios de la reforma pro
salud ante vastas congregaciones.
La exposición de los principios bíblicos realizada por un médico
inteligente ejercerá una poderosa influencia en muchas personas. La
eficiencia y el poder acompañan al que puede combinar en su esfera
de influencia la obra de un médico y la de un ministro evangélico.
Su obra se recomienda por sí misma al buen juicio de la gente.
Consejos prácticos para los médicos
Estoy preocupada porque hay tantas cosas que ocupan la men-
te de nuestros médicos y les impiden llevar a cabo la obra que