La predicación de las verdades distintivas
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las iglesias, sin exceptuar la comunidad católica romana. Nadie es
condenado hasta que haya tenido la luz y haya visto la obligación del
cuarto mandamiento. Pero cuando se ponga en vigencia el decreto
que ordena falsificar el sábado, y el fuerte clamor del tercer ángel
amoneste a los hombres contra la adoración de la bestia y su imagen,
se trazará claramente la línea entre lo falso y lo verdadero. Entonces
los que continúen aún en transgresión recibirán la marca de la bestia.
Con pasos rápidos nos aproximamos a este período. Cuando las
iglesias protestantes se unan con el poder secular para sostener una
falsa religión, a la cual se opusieron sus antepasados soportando
la más terrible persecución, entonces el día de descanso papal será
hecho obligatorio por la autoridad combinada de la iglesia y el
estado. Habrá una apostasía nacional, que determinará tan sólo la
ruina nacional.—
Manuscrito 51, 1899
.
Cuando se rechaza el sello de Dios
—Si se os ha presentado
la luz de la verdad que revela el sábado del cuarto mandamiento
y que muestra que en la Palabra de Dios no hay fundamento para
la observancia del domingo, y sin embargo seguís aferrándoos al
falso día de reposo, rehusando observar el santo sábado al que Dios
llama “mi día santo”, recibís la marca de la bestia. ¿Cuándo ocurre
esto? Cuando obedecéis el decreto que os ordena dejar de trabajar
el domingo para adorar a Dios, mientras sabéis que no hay una sola
palabra en la Biblia que muestre que el domingo no sea un día como
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todos los demás, entonces consentís en recibir la marca de la bestia
y rechazáis el sello de Dios.—
The Review and Herald, 13 de julio
de 1897
.
Como resultado de desobedecer la luz
—Dios ha dado a los
hombres el sábado como una señal entre él y ellos, como una prueba
de su lealtad. Aquellos que, después de recibir la luz concerniente
a la ley de Dios continúen desobedeciendo y exaltando las leyes
humanas por encima de la ley de Dios, en la gran crisis que está
delante de nosotros, recibirán la marca de la bestia.—
Carta 98, 1900
.
Prudencia en la presentación del asunto del domingo
—No
hemos de provocar a los que han aceptado este día de descanso
espurio, una institución del papado, en lugar del santo sábado de
Dios. El que no tengan los argumentos de la Biblia en su favor, los
vuelve más airados y resueltos a suplir en lugar de los argumentos
que faltan en la Palabra de Dios, el poder de su fuerza. La fuerza