Página 380 - El Evangelismo (1994)

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El Evangelismo
sericordia, visiten a las madres y a los niños en sus hogares, y las
ayuden en los deberes cotidianos de la casa, si hay necesidad, antes
de comenzar a hablarles con respecto a la verdad para este tiempo.
Encontraréis que por este método tendréis almas como resultado de
vuestro ministerio.—
The Review and Herald, 12 de julio de 1906
.
Alcancemos los corazones interesándonos en los enfermos
Hermanos y hermanas, consagraos al servicio del Señor. No dejéis
pasar ninguna ocasión favorable. Visitad a los enfermos y dolientes
y manifestadles interés verdadero. Si es posible, haced algo pa-
ra su mejoría. Así ganaréis sus corazones y podréis hablarles del
Salvador.—
Joyas de los Testimonios 3:302 (1909)
.
Sed un amigo para la familia
—Las hermanas pueden hacer
mucho para alcanzar el corazón y enternecerlo. Dondequiera que
estéis, hermanas mías, trabajad con sencillez. Si estáis en un lu-
gar donde hay niños, mostrad interés en ellos. Hacedles ver que los
amáis. Si alguno está enfermo, ofreceos para darle tratamientos; ayu-
dad a la madre que está cargada de preocupación y ansiosa de aliviar
a su hijo que sufre.—
The Review and Herald, 11 de noviembre de
1902
.
Las personas se salvan como individuos, no en masa
—La sal
tiene que unirse con la materia a la cual se la añade; tiene que entrar
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e infiltrarse para preservar. Así, por el trato personal llega hasta los
hombres el poder salvador del Evangelio. No se salvan en grupos,
sino individualmente. La influencia personal es un poder. Tenemos
que acercarnos a los que queremos beneficiar.—
El Discurso Maestro
de Jesucristo, 34 (1896)
.
Se necesitan mujeres como consejeras
—Si alguna mujer, no
importa quién sea, se confía a vuestra simpatí
, ¿ha de tomarla
Ud. y animarla, y recibir cartas de ella y sentir una responsabilidad
especial para ayudarla? Hermano mío, debe Ud. cambiar su conducta
con respecto a tales asuntos, y presentar un ejemplo correcto ante
los pastores que colaboran con Ud. Guarde su simpatía para los
miembros de su propia familia, la cual necesita todo lo que pueda
darles.
Cuando una mujer está en dificultad, lleve ella sus problemas a
una mujer. Si esta mujer que ha recurrido a Ud. tiene causa de queja
Mensaje dirigido a un presidente de asociación.—
Los compiladores.