Página 313 - La Historia de la Redenci

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El mensaje del tercer ángel
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La bestia y su imagen
Mediante esa primera bestia se representa a la Iglesia Romana,
una organización eclesiástica investida de poder civil, con autoridad
para castigar a los disidentes. La imagen de la bestia representa otra
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organización religiosa investida de poderes similares. La formación
de esa imagen es obra de la bestia cuyo pacífico surgimiento y dis-
posición aparentemente bondadosa hacen de ella un notable símbolo
de los Estados Unidos. Aquí se puede encontrar una imagen del
papado. Cuando las iglesias de nuestro país, al unirse en puntos de
fe que les son comunes, influyan sobre el estado para que imponga
sus decretos y apoye sus instituciones, entonces los Estados Unidos,
país protestante, habrán formado una imagen de la jerarquía romana.
Entonces la verdadera iglesia será objeto de persecución, como lo
fue el antiguo pueblo de Dios.
La bestia con los cuernos de cordero ordena que “a todos, pe-
queños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese
una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese
comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la
bestia, o el número de su nombre”.
Apocalipsis 13:16, 17
. Esta es
la marca acerca de la cual el tercer ángel pronuncia su advertencia.
Es la marca de la primera bestia, o sea el papado, y por lo tanto
hay que buscarla entre las características distintivas de ese poder. El
profeta Daniel declaró que la Iglesia Romana, simbolizada por el
cuerno pequeño, pensaría en cambiar los tiempos y la ley (
Daniel
7:25
), mientras Pablo la presenta por medio del hombre de pecado
(
2 Tesalonicenses 2:3, 4
), que habría de exaltarse por encima del
Señor. Sólo al cambiar la ley de Dios podía el papado exaltarse por
encima del Altísimo; todo el que a sabiendas se sometiera a la ley
cambiada, estaría rindiendo supremo honor al poder que llevó a cabo
el cambio.
El cuarto mandamiento, que Roma ha tratado de poner a un lado,
es el único precepto del Decálogo que señala a Dios como Creador
de los cielos y la tierra, y por lo tanto distingue al verdadero Dios
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de los dioses falsos. El sábado fue instituido para conmemorar la
obra de la Creación, y dirigir las mentes de los hombres al Dios
vivo y verdadero. Su poder creador se menciona a lo largo de las
Escrituras como prueba de que el Dios de Israel es superior a las