Página 113 - El Ministerio de Curacion (1959)

Basic HTML Version

Ayuda para los tentados
109
Les daba a entender que sentía mucho afligirlos. Demostraba su
confianza y simpatía para con los que luchaban por vencer.
[124]
“Porque por la mucha tribulación y angustia del corazón—
decía—os escribí con muchas lágrimas; no para que fueseis con-
tristados, mas para que supieseis cuánto más amor tengo para con
vosotros.”
2 Corintios 2:4
. “Porque aunque os contristé por la car-
ta, no me arrepiento, bien que me arrepentí; ... ahora me gozo, no
porque hayáis sido contristados, sino porque fuisteis contristados
para arrepentimiento.... Porque he aquí, esto mismo que según Dios
fuisteis contristados, cuánta solicitud ha obrado en vosotros, y aun
defensa, y aun enojo, y aun temor, y aun gran deseo, y aun celo, y
aun vindicación. En todo os habéis mostrado limpios en el negocio....
Por tanto, tomamos consolación de vuestra consolación.”
2 Corintios
7:8-13
.
“Me gozo de que en todo estoy confiado de vosotros.”
Vers. 16
.
“Doy gracias a mi Dios en toda memoria de vosotros, siempre en
todas mis oraciones haciendo oración por todos vosotros con gozo,
por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta
ahora: estando confiado de esto, que el que comenzó en vosotros la
buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo; como me es
justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón.”
“Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía,
estad así firmes en el Señor, amados.” “Ahora vivimos, si vosotros
estáis firmes en el Señor.”
Filipenses 1:3-7
;
4:1
;
1 Tesalonicenses
3:8
.
Pablo escribía a estos hermanos como “a santos en Cristo Jesús,”
pero no escribía a personas de carácter perfecto. Les escribía como
a hombres y mujeres que luchaban con la tentación, y que corrían
peligro de caer. Dirigía las miradas de ellos al “Dios de paz que
sacó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran Pastor de las
ovejas.” Les aseguraba que “por la sangre del testamento eterno”
Dios los haría “aptos en toda obra buena para” cumplir “su voluntad,”
pues haría él mismo en ellos lo que fuese “agradable delante de él
por Jesucristo.”
Hebreos 13:20, 21
.
[125]
Cuando el que ha cometido una falta se da cuenta de su error,
guardaos de destruir su estima propia. No le desalentéis con vuestra
indiferencia o desconfianza. No digáis: “Antes de depositar en él mi