Página 61 - Nuestra Elevada Vocacion (1962)

Basic HTML Version

Nuestro gran ejemplo, 20 de febrero
Por tanto, hermanos santos, participantes de la vocación celestial,
considerad al Apóstol y Pontífice de nuestra profesión Cristo Jesús.
Hebreos 3:1
.
Os presento al gran Ejemplo. ... El hizo frente y resistió a las tentaciones
de Satanás, tanto como cualquiera de los hijos de la humanidad. Únicamente
en ese sentido podía ser un perfecto ejemplo para el hombre. Se sujetó a
la humanidad, para relacionarse con todas las tentaciones que asediaban al
hombre. Tomó sobre él las debilidades, y llevó las tristezas de los hijos de
Adán.
Fué “hecho semejante a los hermanos”.
Hebreos 2:17
. Experimentó el
gozo y la aflicción, tal como ellos. Su cuerpo fué susceptible al cansancio,
tal como el vuestro. Su mente, como la vuestra, pudo ser atormentada y
quedar perpleja. Si vosotros tenéis dificultades, también él las tuvo. Satanás
pudo tentarlo, sus enemigos pudieron disgustarlo. Los poderes gobernantes
pudieron torturar su cuerpo, los soldados pudieron crucificarlo; y ellos no
pueden hacer más con nosotros. Jesús estuvo expuesto a penalidades, a los
conflictos y a las tentaciones, tal como los hombres. Se convirtió en el Capitán
de nuestra salvación, a través del sufrimiento. El pudo llevar su carga mejor
que nosotros, porque la llevó sin quejarse, sin impaciencia, sin incredulidad,
sin desconsolarse; pero esto no significa que lo haya sentido menos que
cualquiera de los sufrientes hijos de Adán. ...
El período de su infancia y juventud, fué comparativamente oscuro, pero
de la mayor importancia. Se mantuvo en esta oscuridad echando los funda-
mentos de una firme constitución y de una mente vigorosa. “El niño crecía, y
se fortalecía en espíritu”.
Lucas 1:80
. Jesús no nos ha sido presentado como
un hombre encorvado por la edad, viajando por las colinas de Judea. Tenía
la fortaleza de su virilidad. Una vez, Jesús tuvo la edad que Ud. tiene aho-
ra
Jesús pasó por las circunstancias por las que Ud. pasa ahora. Tuvo los
pensamientos que Ud. tiene en este período de su vida, y él no puede pasarlo
por alto a Ud. en este período crítico. El ve los peligros que Ud. corre. Está
relacionado con sus tentaciones, y lo invita a seguir su ejemplo.—
Carta 17,
1878, pp. 4, 5
.
[60]
ste es un extracto de una carta escrita a un joven
.
57