Página 162 - Historia de los Patriarcas y Profetas (1954)

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Capítulo 17—Huida y destierro de Jacob
Este capítulo está basado en Génesis 28 y 31.
Amenazado de muerte por la ira de Esaú, Jacob salió fugitivo de
la casa de su padre; pero llevó consigo la bendición paterna. Isaac
le había renovado la promesa del pacto y como heredero de ella, le
había mandado que tomase esposa de entre la familia de su madre
en Mesopotamia. Sin embargo, Jacob emprendió su solitario viaje
con un corazón profundamente acongojado. Con sólo su báculo en
la mano, debía viajar durante varios días por una región habitada
por tribus indómitas y errantes. Dominado por su remordimiento
y timidez, trató de evitar a los hombres, para no ser hallado por su
airado hermano. Temía haber perdido para siempre la bendición que
Dios había tratado de darle, y Satanás estaba listo para atormentarlo
con sus tentaciones.
La noche del segundo día le encontró lejos de las tiendas de su
padre. Se sentía desechado, y sabía que toda esta tribulación había
venido sobre él por su propio proceder erróneo. Las tinieblas de
la desesperación oprimían su alma, y apenas se atrevía a orar. Sin
embargo, estaba tan completamente solo que sentía como nunca an-
tes la necesidad de la protección de Dios. Llorando y con profunda
humildad, confesó su pecado, y pidió que se le diera alguna eviden-
cia de que no estaba completamente abandonado. Pero su corazón
agobiado no encontraba alivio. Había perdido toda confianza en sí
mismo, y temía haber sido desechado por el Dios de sus padres.
Pero Dios no abandonó a Jacob. Su misericordia alcanzaba to-
davía a su errante y desconfiado siervo. Compasivamente el Señor
reveló a Jacob precisamente lo que necesitaba: un Salvador. Había
pecado; pero su corazón se llenó de gratitud cuando vió revelado un
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camino por el cual podría ser restituído a la gracia de Dios.
Cansado de su viaje, el peregrino se acostó en el suelo, con
una piedra por cabecera. Mientras dormía, vió una escalera, clara y
reluciente, “que estaba apoyada en tierra, y su cabeza tocaba en el
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