Página 236 - Profetas y Reyes (1957)

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Profetas y Reyes
No se dejó a Ezequías sin esperanza. Isaías le mandó palabra
diciendo: “Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Lo que me rogaste
acerca de Sennacherib rey de Asiria, he oído. Esta es la palabra que
Jehová ha hablado contra él:
“Hate menospreciado, hate escarnecido la virgen hija de Sión;
ha movido su cabeza detrás de ti la hija de Jerusalem.
“¿A quién has injuriado y a quién has blasfemado? ¿y contra
quién has hablado alto, y has alzado en alto tus ojos? Contra el Santo
de Israel. Por mano de tus mensajeros has proferido injuria contra
el Señor, y has dicho: Con la multitud de mis carros he subido a las
cumbres de los montes, a las cuestas del Líbano; y cortaré sus altos
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cedros, sus hayas escogidas; y entraré a la morada de su término,
al monte de su Carmel. Yo he cavado y bebido las aguas ajenas,
y he secado con las plantas de mis pies todos los ríos de lugares
bloqueados.
“¿Nunca has oído que mucho tiempo ha yo lo hice, y de días
antiguos lo he formado? Y ahora lo he hecho venir, y fué para desola-
ción de ciudades fuertes en montones de ruinas. Y sus moradores,
cortos de manos, quebrantados y confusos, fueron cual hierba del
campo, como legumbre verde, y heno de los tejados, que antes que
venga a madurez es seco.
“Yo he sabido tu asentarte, tu salir y tu entrar, y tu furor contra
mí. Por cuanto te has airado contra mí, y tu estruendo ha subido a mis
oídos, yo por tanto pondré mi anzuelo en tus narices, y mi bocado
en tus labios, y te haré volver por el camino por donde viniste.”
2
Reyes 19:20-28
.
La tierra de Judá había sido asolada por el ejército ocupante;
pero Dios había prometido atender milagrosamente las necesidades
del pueblo. Ezequías recibió este mensaje: “Y esto te será por señal
Ezechías: Este año comerás lo que nacerá de suyo, y el segundo año
lo que nacerá de suyo; y el tercer año haréis sementera, y segaréis,
y plantaréis viñas, y comeréis el fruto de ellas. Y lo que hubiere
escapado, lo que habrá quedado de la casa de Judá, tornará a echar
raíz abajo, y hará fruto arriba. Porque saldrán de Jerusalem reliquias
y los que escaparán, del monte de Sión: el celo de Jehová de los
ejércitos hará esto.
“Por tanto, Jehová dice así del rey de Asiria: No entrará en esta
ciudad, ni echará saeta en ella; ni vendrá delante de ella escudo, ni