Página 42 - Profetas y Reyes (1957)

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Capítulo 4—Resultados de la transgresión
Entre las causas primarias que indujeron a Salomón a practicar el
despilfarro y la opresión, se destacaba el hecho de que no conservó
ni fomentó el espíritu de abnegación.
Cuando, al pie del Sinaí, Moisés habló al pueblo de la orden
divina: “Hacerme han un santuario, y yo habitaré entre ellos,” la
respuesta de los israelitas fué acompañada por dones apropiados.
“Y vino todo varón a quien su corazón estimuló, y todo aquel a
quien su espíritu le dió voluntad” (
Éxodo 25:8; 35:21
), y trajeron
ofrendas. Fueron necesarios grandes y extensos preparativos para
la construcción del santuario; se necesitaban grandes cantidades
de materiales preciosos, pero el Señor aceptó tan sólo las ofrendas
voluntarias. “De todo varón que la diere de su voluntad, de corazón,
tomaréis mi ofrenda” (
Éxodo 25:2
), fué la orden repetida por Moisés
a la congregación. La devoción a Dios y un espíritu de sacrificio
eran los primeros requisitos para preparar una morada destinada al
Altísimo.
Otra invitación similar, a manifestar abnegación, fué hecha cuan-
do David entregó a Salomón la responsabilidad de construir el tem-
plo. David preguntó a la multitud congregada: “¿Y quién quiere
hacer hoy ofrenda a Jehová?”
1 Crónicas 29:5
. Esta invitación a con-
sagrarse y prestar un servicio voluntario debían recordarla siempre
los que tenían algo que ver con la erección del templo.
Para la construcción del tabernáculo en el desierto, ciertos hom-
bres escogidos fueron dotados por Dios de una habilidad y sabiduría
especiales. “Y dijo Moisés a los hijos de Israel: Mirad, Jehová ha
nombrado a Bezaleel, ... de la tribu de Judá; y lo ha henchido de
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espíritu de Dios, en sabiduría, en inteligencia, y en ciencia, y en todo
artificio... Y ha puesto en su corazón el que pueda enseñar, así él
como Aholiab, ... de la tribu de Dan: y los ha henchido de sabiduría
de corazón, para que hagan toda obra de artificio, y de invención, y
de recamado en jacinto, y en púrpura, y en carmesí, y en lino fino,
y en telar; para que hagan toda labor, e inventen todo diseño. Hizo,
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