Página 37 - La Segunda Venida y el Cielo (2003)

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La segunda venida de Cristo
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la tierra cuando venga Cristo por segunda vez, aquellos que serán
“transformados, en un momento, en un abrir de ojo, a la final trom-
peta”; cuando “esto mortal sea vestido de inmortalidad”, y “esto
corruptible fuere vestido de incorrupción”.* Jesús estaba vestido por
la luz del cielo, como aparecerá cuando venga “la segunda vez, sin
pecado... para salud”. Porque él vendrá “en la gloria de su Padre
con los santos ángeles”.* La promesa que hizo el Salvador a los
discípulos quedó cumplida. Sobre el monte, el futuro reino de gloria
fue representado en miniatura: Cristo el Rey, Moisés el representante
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de los santos resucitados, y Elías de los que serán trasladados.—
El
Deseado de Todas las Gentes, 390
.
Carta escrita por Elena de White a la muerte de la niña de
su hermana melliza
—Con frecuencia se marchitan nuestras es-
peranzas más acariciadas. La muerte nos arranca a nuestros seres
amados. Cerramos sus ojos, los vestimos para la tumba y los oculta-
mos de nuestra vista. Pero la esperanza nos hace cobrar ánimo. No
estaremos separados para siempre, sino que volveremos a encontrar
a nuestros seres amados que duermen en Jesús. Volverán de la tierra
del enemigo. El Dador de la vida está por venir. Millares de santos
ángeles lo escoltan en su camino. Él rompe las cadenas de la muerte,
destruye los grilletes de la tumba, y entonces los preciosos cautivos
salen con salud y belleza inmortales.
Cuando los niñitos salen inmortalizados de sus lechos polvo-
rientos, inmediatamente vuelan hacia los brazos de sus madres. Se
reúnen para nunca más separarse. Pero muchos niñitos no tienen
madres allí. Procuramos en vano escuchar el canto de triunfo en-
tonado con arrobamiento por la madre. Los ángeles reciben a los
niños sin madres y los conducen hacia el árbol de la vida.
Jesús coloca el dorado anillo de luz, la corona sobre sus cabecitas.
Dios permita que la querida madre de “Eva” pueda estar allí, que sus
pequeñas alas puedan plegarse sobre el feliz pecho de su madre.—
Mensajes Selectos 2:297
.
Familias y amigos reunidos
—Los justos vivos son mudados
“en un momento, en un abrir de ojo”. A la voz de Dios fueron
glorificados; ahora son hechos inmortales, y juntamente con los
santos resucitados son arrebatados para recibir a Cristo su Señor en
los aires. Los ángeles “juntarán sus escogidos de los cuatro vientos,
de un cabo del cielo hasta el otro”. Santos ángeles llevan niñitos a los
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