Página 38 - Testimonios Acerca de Conducta Sexual, Adulterio y Divorcio (1993)

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Capítulo 5—Conducta del cónyuge cristiano
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No pensar en el divorcio
—Aunque la esposa no sea creyente y
se oponga a la fe de su compañero, según la ley de Dios, el esposo
no debe dejarla por esa razón. Para mantenerse en armonía con la ley
de Jehová, debe seguir viviendo con ella, a menos que ella misma,
por su propia decisión, sea la que decida irse de la casa.—
Carta 8,
1888
.
Obligaciones de una esposa cristian
—Tengo algo de parte
de Dios para comunicarle... El Señor tiene una obra para que Ud.
realice. No se trata de una obra pública, sino de otra más importante;
una tarea que debe realizar en su propio hogar, siendo leal a su
posición de esposa y madre. La tarea que le corresponde a Ud. nadie
más puede llevarla a cabo.
El Espíritu y la Palabra de Dios armonizan. Tomando en cuenta
esto, leamos las palabras que Pablo, por inspiración de Jesucristo,
dirige a Tito: “Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana
doctrina. Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos
en la fe, en el amor, en la paciencia. Las ancianas asimismo sean
reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino,
maestras del bien; que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus
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maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa,
buenas, sujetas a sus maridos, para que la Palabra de Dios no sea
blasfemada”.
Tito 2:1-5
.
El primer deber de una esposa: su hogar
—Con la Escritura
delante de Ud., le pregunto: ¿En qué está invirtiendo su tiempo en
Battle Creek? ¿La ha llamado Dios a descuidar a su familia? No, no.
Hermana mía, el Señor me ha mostrado que Ud. está errando en sus
deberes. Su esposo la necesita; sus niños necesitan a la madre. Ud.
se ha desviado de la senda. El le dice: “Sígueme”, pero para dirigirla
de vuelta a sus deberes hogareños, los cuales han sido tristemente
descuidados. La voz del Señor no le ha ordenado que separe sus
Carta escrita a una esposa que, debido al serio abuso de su impío esposo, decidió
abandonar a su familia y realizar obra misionera.
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