200
Joyas de los Testimonios 2
sencillez y amuebladas de la misma manera, ello revelaría el poder
santificador de la verdad, y ejercería una influencia poderosa sobre
los incrédulos. Pero mientras nos conformemos al mundo en estos
asuntos, buscando aparentemente en algunos casos superar a los
mundanos en arreglos fantásticos, la predicación de la verdad tendrá
poco o ningún efecto. ¿Quién habrá de creer la solemne verdad para
este tiempo, cuando los que ya profesan creerla contradicen su fe
por sus obras? No es Dios quien ha cerrado las ventanas de los cielos
para nosotros, sino nuestra propia conformidad a las costumbres y
prácticas del mundo
[216]
Testimonios para la Iglesia 5:206 (1882)
.