Página 148 - Mente, Car

Basic HTML Version

144
Mente, Carácter y Personalidad 2
El remedio para la ansiedad
Y Dios cuida y sostiene todas las cosas que ha creado [...]. No
se derraman lágrimas sin que él lo note. No hay sonrisa que para él
pase inadvertida.
Si creyéramos plenamente esto, toda ansiedad indebida desapa-
recería. Nuestras vidas no estarían tan llenas de desengaños como
ahora; porque cada cosa, grande o pequeña, debe dejarse en las
manos de Dios, quien no se confunde por la multiplicidad de los
cuidados, ni se abruma por su peso. Gozaríamos entonces del reposo
del alma al cual muchos han sido por largo tiempo extraños.—
El
Camino a Cristo, 85 (1892)
.
La fe disipa la ansiedad
Todos anhelamos la felicidad, pero muchos rara vez la encuen-
tran debido a los métodos equivocados que usan al perseguirla en
vez de luchar por ella. Debemos luchar ardientemente y combinar
nuestros deseos con la fe. Entonces la felicidad nos embargará casi
de repente [...]. Cuando podamos, por desagradables que sean las cir-
cunstancias, reposemos confiadamente en su amor y encerrémonos
[119]
con él, descansando apaciblemente en su ternura, y la sensación de
su presencia nos inspirará un gozo profundo y sereno. Este proceso
nos conferirá una fe que nos capacitará para no inquietarnos, ni
afligirnos, sino para apoyarnos en un poder que es infinito.—
MeM
189 (1897)
.
El principio básico
Los que aceptan el principio de dar al servicio y la honra de Dios
el lugar supremo, verán desvanecerse las perplejidades y percibirán
una clara senda delante de sus pies.—
El Deseado de Todas las
Gentes, 297 (1898)
.
Vivir un día a la vez: un principio de máxima importancia
El fiel cumplimiento de los deberes de hoy es la mejor prepara-
ción para las pruebas de mañana. No amontonemos las eventuali-
dades y los cuidados de mañana para añadirlos a la carga de hoy.