Página 273 - Mensajes Selectos Tomo 2 (1967)

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Los enlutados
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QUERIDOS NIÑOS,
Debo escribiros unas pocas líneas. Quisiéramos ir a vuestra
casa y llorar con vosotros y arrodillarnos con vosotros en oración.
¿Quiere cada uno de vosotros buscar al Señor y servirle? Podéis ser
una gran bendición para vuestra madre al no hacer ninguna cosa que
la aflija. El Señor Jesús os recibirá si le entregáis vuestros corazones.
Haced todo lo que sea posible para aliviar a vuestra madre de las
preocupaciones y las tareas.
El Señor ha prometido ser un padre para los huérfanos. Si le
entregáis vuestros corazones, él os dará poder para llegar a ser hijos
e hijas de Dios. Si los hijos mayores alivian a la madre realizando
todas las tareas que les sea posible, tratando con bondad a sus her-
manos menores y enseñándoles a hacer el bien y a no preocupar a
su madre, el Señor los bendecirá mucho.
Entregad vuestros corazones al Salvador amante, y haced única-
mente las cosas que le agradan. No hagáis nada que aflija a vuestra
madre. Recordad que el Señor os ama, y que cada uno de vosotros
puede llegar a ser un miembro de la familia de Dios. Si sois fieles
aquí, cuando él venga en las nubes de los cielos, volveréis a encontrar
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a vuestro padre, y volveréis a constituir una familia unida.
Con todo amor.—
Carta 165, 1905
.
Que el señor sea su consuelo
En ocasión de la muerte de un esposo
QUERIDA HERMANA,
Acabo de recibir una carta de la Hna. G, en la que me informa
acerca de su aflicción. Simpatizo profundamente con Ud., hermana
mía. Si pudiera visitarla, lo haría...
Quiero decirle, hermana, que el Señor no desea que Ud. sea
postrada por el dolor. Su esposo vivió con Ud. muchos años más de
los que yo había supuesto que viviría. Dios le prolongó la vida con
misericordia, y después de sus sufrimientos misericordiosamente
lo hizo dormir en Jesús... Su esposo y mi esposo descansan. Ya no
experimentan más dolor ni sufrimientos. Ahora descansan.
Siento, hermana mía, que Ud. tenga aflicción y dolor. Pero Jesús,
el precioso Salvador, vive. Vive para Ud. No se preocupe, sino que