Página 430 - Mensajes Selectos Tomo 2 (1967)

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Mensajes Selectos Tomo 2
negarse a satisfacer el apetito, para comer con más mesura única-
mente alimentos saludables, con lo cual podrían evitarse una gran
cantidad de sufrimientos.
Deberían realizarse esfuerzos para preservar cuidadosamente lo
que resta de las fuerzas vitales, suprimiendo toda carga excesiva.
Puede ser que en algún caso el estómago nunca recupere plenamente
la salud, pero un régimen adecuado ahorrará más males ulteriores,
y muchas personas podrán disfrutar de una recuperación mayor o
menor, a menos que hayan ido demasiado lejos en la glotonería
suicida.
Los que se dejan esclavizar por un apetito mórbido, con fre-
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cuencia avanzan un poco más y se rebajan al satisfacer sus pasiones
corrompidas, las que han sido excitadas por la intemperancia en la
comida y la bebida. Dan rienda suelta a sus pasiones degradantes
hasta que la salud y el intelecto experimentan un gran padecimien-
to. El poder de razonamiento es destruido en gran medida por los
hábitos inadecuados.
Me ha admirado el que los habitantes de la tierra no hayan sido
destruidos como la generación de Sodoma y Gomorra. Hay razones
que explican la condición actual de degeneración y mortalidad que
impera en el mundo. La pasión ciega controla la razón, y muchos
sacrifican todas las cosas de importancia superior en el altar de la
concupiscencia.
El primer gran mal fue la intemperancia en la comida y en la
bebida. Los hombres y las mujeres se han convertido en esclavos
del apetito.
El cerdo, aunque constituye uno de los artículos más comunes
del régimen alimenticio, es uno de los más perjudiciales. Dios no
prohibió que los hebreos comiesen carne de cerdo únicamente para
mostrar su autoridad, sino porque no era un alimento adecuado para
el hombre. Llenaba el organismo con escrófula, y especialmente
en ese clima cálido producía lepra y diversas clases de enfermeda-
des. La influencia sobre el organismo en ese clima era mucho más
perjudicial que en un clima más frío. Pero Dios nunca se propu-
so que se consumiese cerdo en circunstancia alguna. Los paganos
consumían el cerdo como alimento, y el pueblo norteamericano ha
utilizado abundantemente el cerdo como un importante artículo de
alimentación. La carne de cerdo no sería agradable al paladar en su