Página 80 - Consejos para los Maestros (1971)

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Consejos para los Maestros
El estudio de la Biblia
Para que la moralidad y la religión se manifiesten en una escuela,
es necesario impartir el conocimiento de la Palabra de Dios. Algunos
pueden insistir en que si la enseñanza religiosa recibe preeminencia,
nuestra escuela se hará impopular; y los que no son de nuestra fe
no asistirán ni le mandarán alumnos. Muy bien, váyanse entonces a
otros colegios, donde hallarán un sistema de educación a su gusto.
Nuestra escuela fue establecida, no simplemente para enseñar las
ciencias, sino con el propósito de instruir en los grandes principios
de la Palabra de Dios, y en los deberes prácticos de la vida diaria.
Tal es la educación que tanto se necesita actualmente.
Si ha de sentirse una influencia mundana en nuestra escuela, ven-
dámosla a los mundanos, dejémoslos encargarse de toda la dirección;
y los que han invertido sus recursos en esa institución establecerán
otra escuela, que será dirigida, no según el plan de las escuelas popu-
lares y según los deseos del director y los maestros, sino de acuerdo
con el plan que Dios ha especificado.
En el nombre de mi Maestro, ruego a todos lo que ocupan po-
siciones de responsabilidad en esa escuela, que sean hombres de
Dios. Cuando el Señor requiere de nosotros que seamos distintos
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y peculiares, ¿cómo podemos anhelar la popularidad, o procurar
imitar las costumbres y prácticas del mundo? Dios ha declarado su
propósito de tener en la tierra un colegio donde la Biblia tenga su
debido lugar en la educación de los jóvenes. ¿Haremos nuestra parte
en la ejecución de sus propósitos?...
Por medio de la prensa se pone toda clase de conocimiento al
alcance de cualquiera; y sin embargo, cuán grande es en toda comu-
nidad el número de los depravados en su moralidad y superficiales
en sus realizaciones mentales. Si la gente quisiera tan sólo leer la
Biblia y estudiarla, veríamos un estado de cosas diferente.
En una época como la nuestra, en la cual abunda la iniquidad, y el
carácter de Dios y su ley son igualmente despreciados, debe tenerse
especial cuidado de enseñar a los jóvenes a estudiar, reverenciar y
obedecer su voluntad divina, tal como ha sido revelada a los hombres.
El temor de Jehová está desvaneciéndose de la mente de nuestros
jóvenes, debido a su negligencia en el estudio de la Biblia.