Página 127 - Consejos sobre Mayordom

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Robando a Dios el servicio legítimo
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ayudar y bendecir a los demás. Envuelven su talento en un lienzo
y lo entierran, y se halagan a sí mismos diciéndose que poseen una
humildad encomiable. Pero los libros del cielo testifican contra esos
ociosos, como siervos perezosos y malvados que pecan atrevida-
mente contra Dios descuidando la obra que él les ha encomendado.
No podrán alegar falta de capacidad cuando se abran los registros
celestiales y se ponga de manifiesto su descuido evidente.
Cualquiera sea el talento que se nos ha confiado, se requiere que
lo utilicemos para el servicio de Dios y no para servir a Mammón...
Los que ocultan sus talentos en la tierra están despreciando sus
oportunidades para obtener una corona cuajada de gemas. Hasta
el día cuando se hagan las grandes revelaciones del juicio final, no
se sabrá cuántos hombres y mujeres han hecho esto, ni tampoco
cuántas vidas se han perdido en las tinieblas porque los talentos
dados por Dios han sido sepultados en los negocios en lugar de ser
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utilizados al servicio del Dador...
Los hombres... pueden interesarse en minas que rinden grandes
beneficios en términos de plata y oro. Pueden dedicar toda una
vida a conseguir tesoros terrenales; pero cuando mueren dejan todo
tras ellos. No pueden llevar con ellos ni un solo peso al gran más
allá. ¿Son sabios estos hombres? ¿No actúan insensatamente al
permitir que las preciosas horas del tiempo de gracia pasen, sin
realizar una preparación para la vida futura? Los que son sensatos
se harán “tesoro en los cielos que no se agote” (
Lucas 12:33
), y
pondrán un “buen fundamento para lo por venir, que echen mano
de la vida eterna”.
1 Timoteo 6:19
. Si hemos de conseguir riquezas
duraderas, comencemos ahora a transferir nuestro tesoro al otro
lado, y nuestros corazones estarán donde está nuestro tesoro.—
The
Review and Herald, 7 de octubre de 1884
.
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