Página 455 - Conducci

Basic HTML Version

Las recompensas
451
Los hijos condenarán a los padres infieles
—La maldición de
Dios descansará seguramente sobre los padres infieles. No sólo
están ellos plantando espinas que los habrán de herir aquí, sino
que deberán arrostrar su propia responsabilidad cuando se abra el
[534]
juicio. Muchos hijos se levantarán en el juicio y condenarán a sus
padres, porque no los reprendieron, y los harán responsables de su
destrucción. La falsa simpatía y el amor ciego de los padres los
impulsa a excusar y a no corregir las faltas de sus hijos, y como
consecuencia éstos se pierden y la sangre de sus almas recaerá sobre
los padres infieles.—
Joyas de los Testimonios 1:78, 79
.
Los hijos rendirán homenaje a los padres fieles
—Cuando em-
piece el juicio y los libros sean abiertos, cuando sea pronunciado
el “Bien hecho” del gran Juez, y colocada en la frente del vence-
dor la corona de gloria inmortal, muchos levantarán sus coronas
a la vista del universo reunido y, señalando a sus madres, dirán:
“Ella hizo de mí todo lo que soy mediante la gracia de Dios. Su
instrucción, sus oraciones, han sido bendecidas para mi salvación
eterna”.—
Mensajes para los Jóvenes, 328
.
Se manifestarán los resultados de la preparación fiel
—Todos
los que obraron con espíritu abnegado, verán el fruto de sus labores.
Se verá el resultado de cada principio recto y acción noble. Algo de
ello vemos ahora. Pero ¡cuán poco del resultado de la obra más noble
del mundo se manifiesta en esta vida al obrero! ¡Cuántos trabajan
abnegada e incansablemente por los que pasan más allá de su alcance
y conocimiento! Los padres y maestros caen en su último sueño con
la sensación de que ha sido en vano la obra de su vida; no saben
que su fidelidad ha abierto manantiales de bendiciones que nunca
pueden dejar de fluir; sólo por la fe ven a los hijos que han criado
transformarse en una bendición e inspiración para sus semejantes,
y multiplicarse mil veces su influencia. . . . Los hombres siembran
la semilla de la cual, sobre sus sepulcros, otros recogen cosechas
abundantes. Plantan árboles para que otros coman sus frutos. Se
contentan aquí con saber que han puesto en acción agentes que obran
[535]
para bien. En lo futuro se verá la acción y reacción de todo esto.—
La
Educación, 295
.
Los padres pueden llevar a sus hijos consigo a la Tierra Pro-
metida
—Dios ha permitido que brille luz de su trono para que
alumbre todo el sendero de la vida. Una columna de nube de día,