Página 224 - El Conflicto de los Siglos (2007)

Basic HTML Version

220
El Conflicto de los Siglos
para obrar con sus hermanos como Dios obró con él mismo por
Jesucristo”. “Yo quiero—dice el autor—servir libre, gozosa y de-
sinteresadamente a un Padre que me ha dado toda la abundancia de
sus bienes; quiero obrar hacia mis hermanos, así como Cristo obró
hacia mí”. “De la fe—prosigue el autor—dimana una vida llena de
libertad, de caridad y de alegría. ¡Oh! ¡cuán elevada y noble es la
vida del cristiano! [...] Por la fe se eleva el cristiano hasta Dios; por el
amor, desciende hasta al hombre; y no obstante permanece siempre
en Dios. He aquí la verdadera libertad; libertad que sobrepuja a toda
otra libertad, tanto como los cielos distan de la tierra” (D’Aubigné,
Histoire de la Réformation du seizième siècle
, lib. 6, cap. 7).
Estas exposiciones de la libertad del evangelio no podían dejar
de llamar la atención en un país donde el amor a la libertad era tan
arraigado. Los tratados y folletos pasaron de mano en mano. Los
amigos del movimiento evangélico en Suiza, Alemania y los Países
Bajos seguían mandando a España gran número de publicaciones.
No era tarea fácil para los comerciantes burlar la vigilancia de los
esbirros de la Inquisición, que hacían cuanto podían para acabar con
[225]
las doctrinas reformadas, contrarrestando la ola de literatura que iba
inundando al país
No obstante, los amigos de la causa perseveraron, hasta que
muchos miles de tratados y de libritos fueron introducidos de con-
trabando, burlando la vigilancia de los agentes apostados en los
principales puertos del Mediterráneo y a lo largo de los pasos del
Pirineo. A veces se metían estas publicaciones dentro de fardos de
heno o de yute (cáñamo de las Indias), o en barriles de vino de
Borgoña o de Champaña (H. C. Lea,
Chapters from the Religious
History of Spain
, p. 28). A veces iban empaquetadas en un barril
interior impermeable dentro de otro barril más grande lleno de vino.
Año tras año, durante la mayor parte del siglo décimosexto, hicié-
ronse esfuerzos constantes para abastecer al pueblo con Testamentos
y Biblias en castellano y con los escritos de los reformadores. Era
El extinto Dr. Ed. Boehme, de la Universidad de Estrasburgo, y miembro corres-
pondiente de la Real Academia Española, hace un curioso relato de este comercio en
libros protestantes entre Alemania y España, en su obra inglesa
Spanish Reformers of
Two Centuries from 1520
, tomo 2, pp. 64, 65. Dicho relato, basado en documentos de
la época, denota un comercio muy activo llevado a cabo secretamente con amigos de la
causa protestante en España.