Página 138 - Consejos Sobre la Salud (1989)

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Consejos Sobre la Salud
maravillosa experiencia con Dios. Pero una experiencia verdadera
estará en armonía con las leyes naturales y divinas; la experiencia
falsa es contraria a las leyes de la vida y los preceptos de Jehová.
El apetito controla a los antediluvianos
Desde la primera derrota frente al apetito la humanidad se ha
vuelto más y más autocomplaciente, hasta que la salud ha sido sa-
crificada sobre los altares del apetito. Los habitantes del mundo
antediluviano eran intemperantes en la comida y la bebida. Consu-
mían carne a pesar de que en ese tiempo Dios todavía no había dado
permiso al hombre para alimentarse de animales. Continuaron su
forma pervertida de comer y beber hasta que la complacencia de sus
apetitos depravados no tuvo límite; tanta fue su corrupción que Dios
no pudo soportarla más. Su copa de iniquidad estaba colmada y Dios
purificó la tierra de su contaminación moral mediante el diluvio.
Intemperancia después del diluvio
Al multiplicarse los hombres sobre la faz de la tierra después
del diluvio, nuevamente se olvidaron de Dios y corrompieron sus
caminos delante de él. Aumentó la intemperancia en todas sus for-
mas, hasta que casi todo el mundo había caído en sus garras. Hay
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ciudades enteras que han sido barridas de sobre la faz de la tierra
por sus crímenes perversos y por la iniquidad que las convirtió en
manchas sobre el inmaculado campo de las obras creadas por Dios.
La gratificación de los apetitos pervertidos condujo a los hombres
a los pecados que causaron la destrucción de Sodoma y Gomorra.
Dios señala la glotonería y la embriaguez como la causa de la caída
de Babilonia. La indulgencia del apetito y las pasiones fueron la
base de todos sus pecados.
La experiencia de Esaú
Esaú deseaba insistentemente un tipo de comida especial, y había
complacido su apetito por tanto tiempo, que no vio la necesidad de
rehusar el platillo tentador. Permitió que su imaginación acariciara
ese platillo hasta que el poder del apetito arrasó toda otra consi-
deración y lo controló. Pensó que sufriría grandes inconvenientes