Página 236 - La Maravillosa Gracia de Dios (1973)

Basic HTML Version

La determinación es la clave, 5 de agosto
Me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a
éste crucificado.
1 Corintios 2:2
.
Muchos son atraídos por la belleza de Cristo y la gloria del cielo, y sin
embargo rehúyen las únicas condiciones por las cuales pueden obtenerlas...
La renuncia a su propia voluntad y a cuanto escogieron como objeto de su
afecto o ambición exige un sacrificio ante el cual vacilan, se estremecen y
retroceden... Desean el bien, hacen algún esfuerzo para obtenerlo, pero no
lo escogen; no tienen un propósito firme de procurarlo a toda costa.
Nuestra única esperanza, si queremos vencer, radica en unir nuestra
voluntad a la de Dios, y trabajar juntamente con él, hora tras hora y día tras
día. No podemos retener nuestro espíritu egoísta y entrar en el reino de Dios.
Si alcanzamos la santidad, será por el renunciamiento al yo y por aceptar
el sentir de Cristo. El orgullo y el egoísmo deben crucificarse. ¿Estamos
dispuestos a pagar lo que se requiere de nosotros? ¿Estamos dispuestos a
permitir que nuestra voluntad entre en conformidad perfecta con la de Dios?
Mientras no lo estemos, su gracia transformadora no puede manifestarse en
nosotros.—
El Discurso Maestro de Jesucristo, 117
.
Al conocernos cabalmente a nosotros mismos, y combinando nuestra
firme decisión con la gracia de Dios, podremos ser vencedores y llegar
a la perfección en todas las cosas sin que nada nos falte.—
Meditaciones
Matinales, 100
.
Las circunstancias adversas deberían crear una firme determinación
de vencerlas. El quebrantar una barrera dará mayor habilidad y valor para
seguir adelante. Avanzad con determinación en la debida dirección, y las cir-
cunstancias serán vuestros ayudadores, no vuestros obstáculos.—
Palabras
de Vida del Gran Maestro, 311
.
El carácter cristiano está señalado por una singularidad de propósito, una
determinación indomable, que rehúsa someterse a la influencia mundana,
y que no tratará de alcanzar nada menos que la norma bíblica... La consa-
gración del seguidor de Cristo debe ser completa... Debe estar dispuesto a
soportar paciente, alegre y gozosamente todo lo que en la providencia de
Dios sea llamado a sufrir.—
The S.D.A. Bible Commentary 2:1003
[226]
—M. G. de D.
232