Página 114 - Obreros Evang

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La gracia de la cortesía
Aquellos que trabajan para Cristo han de ser íntegros y fidedig-
nos, firmes como una roca en sus principios, y al mismo tiempo
bondadosos y corteses. La cortesía es una de las gracias del Espíritu.
El tratar con las mentes humanas es la mayor obra jamás confiada al
hombre; y el que quiera obtener acceso a los corazones debe acatar
la recomendación: “Sed ... compasivos, corteses.
El amor hará lo
que no logrará la discusión. Pero un momento de petulancia, una
sola respuesta abrupta, una falta de cortesía cristiana en algún asunto
sin importancia, puede dar por resultado la pérdida tanto de amigos
como de influencia.
El obrero cristiano debe esforzarse por ser lo que Cristo era cuan-
do vivía en esta tierra. El es nuestro ejemplo, no sólo en su pureza
sin mancha, sino también en su paciencia, amabilidad y disposición
servicial. Su vida es una ilustración de la cortesía verdadera. El
tenía siempre una mirada bondadosa y una palabra de consuelo para
los menesterosos y los oprimidos. Su presencia hacía más pura la
atmósfera del hogar. Su vida era como levadura que obraba entre
los elementos de la sociedad. Puro y sin mancha, andaba entre los
irreflexivos, groseros y descorteses; entre injustos publicanos y sa-
maritanos, soldados paganos, toscos campesinos y la muchedumbre.
Aquí y allí dejaba caer palabras de simpatía. Al ver a hombres can-
sados obligados a llevar pesadas cargas, compartía éstas con ellos
mientras les repetía las lecciones que había aprendido de la naturale-
za acerca del amor y bondad de Dios. Trataba de inspirar esperanza
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a los más toscos y a los menos promisorios, presentándoles la se-
guridad de que podrían llegar a poseer un carácter que los revelaría
como hijos de Dios.
La religión de Jesús ablanda cuanto haya de duro y brusco en el
genio, y suaviza lo tosco y violento de los modales. Hace amables
las palabras y atrayente el porte. Aprendamos de Cristo a combinar
un alto sentido de la pureza e integridad con una disposición alegre.
1 Pedro 3:8 (VM)
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